Al encuentro desarrollado en el acceso a la Piscina Olímpica del Estadio, a metros del histórico recinto Camarín de Mujeres, donde más de mil 200 compañeras sufrieron la angustia y vejación del encierro y la prisión política, asistieron representantes de la Corporación Estadio Nacional, encabezados por su Presidente, Marcelo Acevedo, dirigentes provinciales de ANFUCHID, además de su Presidente Álvaro Muñoz, y el Presidente Nacional de ANEF, José Pérez Debelli.

En el acto, los dirigentes reiteraron la denuncias a la autoridad del IND, el MINDEP y de la administración del Estadio, a cargo de Roberto Rojas, funcionario de confianza de la Ministra Cecilia Pérez, agregando que al atropello de la instalación, se agrega la indolencia de la autoridad del Ministerio e Instituto respecto al trabajo de la Corporación, situación que genera no solo molestia sino además extrañeza, ya que los anteriores responsables a cargo del recinto bajo la administración Piñera, Gabriel Ruiz-Tagle y Pauline Kantor, mantuvieron una actitud dialogante y constructiva respecto al trabajo de Memoria, situación que cambió dramáticamente con la llegada de Pérez y su equipo de confianza.  

Al respecto, el Presidente de la Corporación, Marcelo Acevedo, señaló que “Tanto vecinos del sector como nosotros como Corporación hicimos la denuncia al Consejo de Monumentos Nacionales respecto a la instalación de las rejas, sin que hasta ahora hayamos tenido respuesta. Como ya se sabe, los sitios de Memoria del Estadio están protegidos por la Ley de Patrimonio, y el recinto completo (más de 60 hectáreas), es Monumento Nacional, por lo tanto cualquier modificación, construcción o reparación debe hacerse con la venia de los organismos correspondientes, especialmente el sector Camarín de Mujeres, que goza de protección especial. La única respuesta formal que hemos recibido es un correo electrónico enviado tres semanas después de hecha la consulta al IND, donde se nos da a entender que no se solicitó autorización para ejecutar las obras, en el entendido de que no se necesita ya que no altera el sitio, afirmación que evidentemente cuestionamos y rechazamos. Las rejas están colocadas sobre las jardineras que rodean el Camarín, que era el lugar donde las prisioneras podían sentarse por algunos momentos a compartir historias y contenerse en los pocos momentos de tranquilidad que les permitía el duro régimen de encierro. Acudiremos a todas las instancias para que retiren las rejas y hacemos un llamado a toda la comunidad para que nos apoye a relevar y mantener la Memoria. Nosotros somos parte del Estadio, nos hemos ganado el derecho a estar aquí, y queremos ser partícipes de las decisiones que se tomen respecto al recinto”.

A su turno, el Presidente Nacional de ANEF, José Pérez Debelli, enfatizó que para la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales la presencia y apoyo a la Corporación y a las organizaciones que defienden la Memoria, constituye una obligación: “Esto se vincula con el respeto incondicional y la promoción de la defensa de los Derechos Humanos. Creemos que estamos frente a una acción violenta y una falta de respeto que desnaturaliza el trabajo que, principalmente las compañeras, han realizado en este recinto y que debe quedar para las nuevas generaciones. Hoy la Ministra del Deporte, de forma unilateral, al estilo del gobierno, pretende imponer esta construcción aludiendo a un supuesto cierre de seguridad, pero eso se conversa. Junto a ANFUCHID, nos ponemos a disposición de la Corporación para resolver este tema y solicitaremos a la Contraloría General de la República una auditoria respecto al presupuesto de estos trabajos y su legalidad”.

Más adelante, el Presidente Nacional de ANFUCHID, Álvaro Muñoz, señaló que: “Como sindicato apoyamos de forma irrestricta a la Corporación ya que hemos trabajado con ellos desde nuestra creación y preparamos en conjunto el acto del 11 de Septiembre. Repudiamos y condenamos a la Ministra por romper la buena relación que la Corporación tenía con las autoridades de nuestro sector. Al llegar, Cecilia Pérez instaló a Roberto Rojas, un joven sin ninguna experiencia que pertenece a su círculo social, y que ha sido irrespetuoso con los espacios de memoria. Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para apoyar a la Corporación, ya que esto nos pertenece a todos. Y denunciaremos todos los movimientos impropios y fuera de norma que la autoridad ha estado haciendo en el Estadio”, cerró el Presidente de ANFUCHID.

El acto, recibió el apoyo transversal de organizaciones de trabajadores, vecinos y parlamentarios. A través de un saludo formal, la diputada Carmen Hertz, manifestó su solidaridad con quienes han mantenido los sitios de Memoria del Estadio donde miles de personas padecieron el horror de la tiranía, y cientos fueron ejecutados: “No es posible agraviar la Memoria de nuestro país y que se pretenda remodelar el Estadio Nacional sin consultar a los organismos de conservación y a la Asociación de Funcionarios. No es posible aceptar, una vez más, que se agravie la memoria histórica y colectiva de nuestro pueblo”.

Los vecinos del Estadio, a través de la coordinadora Julio Guerra por la Memoria y los DDHH, de la Villa Olímpica, no quisieron restarse de esta movilización: “Queremos expresar toda nuestra solidaridad con la defensa que se está haciendo de este sitio de Memoria. No solamente se nos ha negado la verdad y la justicia sino que ahora además se pretende afectar los símbolos de lo que fueron las violaciones a los DDHH en Chile. Debemos unirnos y seguir luchando por la verdad y la Memoria, que no puede sernos arrebatada”.

El cierre de la actividad, se vio empañado por la aparición de un grupo de Carabineros vestidos de civil, quienes a bordo de un auto regular sin identificaciones oficiales, y premunidos de armas automáticas a la vista, se acercaron a requerir a los asistentes respecto de la actividad, solicitando información. A esto se suma el hecho de que, antes del acto, el administrador del Estadio, impidió el acceso a la sede sindical de ANFUCHID al Presidente Metropolitano de nuestra Asociación, Yerko Cortés, quien estaba acompañado por el Presidente de ANEF, José Pérez Debelli.

Como ANFUCHID repudiamos estas acciones, señalando enfáticamente que no nos dejaremos amedrentar por este tipo de acciones cobardes de intimidación. El deber moral de las autoridades es dialogar con los trabajadores y la comunidad.